Septiembre 30 - 2022 

Por Jorge Luis Galeano Bolaños 

En Cali hay alrededor de 84 mil personas migrantes venezolanas quienes viven en distintas condiciones, pero que comparten algo: el sueño de una mejor vida y como única opción, les quedó dejar su país. En esta ciudad, deben soportar no solo las difíciles condiciones económicas y de exclusíón en las que llegan, sino, muchas veces, la xenofobia, el temor de quienes ven a los y las migrantes, como un peligro para la seguridad, la empleabilidad, etc.

La reapertura de la frontera entre Colombia y Venezuela podría abrir la oportunidad, no sólo de la normalización de las relaciones comerciales, sino de mejorar las relaciones humanas que privilegien la dignidad sobre la nacionalidad. Un trabajo largo, difícil, pero necesario.

Bienvenidos y bienvenidas.