Caso Sigifredo López: La culpa de un inocente

Un caso que estremeció a Colombia y que involucró no sólo el debido proceso de la Justicia, sino también, el papel de los medios de comunicación, acusados algunos de dictar sentencia contra Sigifredo López. 3 meses más de detención para un hombre que creyó haber ganado su libertad definitiva hace dos años. Recuento del caso.

Caso Sigifredo López: La culpa de un inocente 

Agosto 17-2012

 

Por Liliana Sinisterra

El 17 de mayo ya entrando la noche, agentes del CTI de la Fiscalía capturaron al ex diputado del Valle del Cauca y ex secuestrado por las Farc, Sigifredo López Tobón, en su residencia en la capital vallecaucana. La captura no sólo tomó por sorpresa a López y a su familia, sino también a la opinión publica.

Las hipótesis diversas empezaron a surgir, los rumores y también los juicios premeditados a favor y en contra. Este proceso se dio por los delitos de “rebelión, perfidia, toma de rehenes y homicidio. El arresto fue ordenado por el fiscal 38 de la Unidad de Derechos Humanos, bajo el sistema penal mixto o Ley 600 (anterior al sistema oral acusatorio)”, indicaron varios medios de comunicación

Al día siguiente, el 18 de mayo López Tobón fue trasladado al búnker de la Fiscalía en Bogotá y ahí empezó nuevamente un viacrucis, similar al que vivió por años cuando fue secuestrado por el grupo subversivo. Rindió indagatoria ante el ente acusador y reiteró su inocencia. Incluso dijo que pruebas como el video de la planeación del secuestro de los diputados del Valle en 2002, la supuesta comunicación telefónica entre él y los guerrilleros y la permisividad durante el cautiverio, eran sólo conjeturas.

Una nueva luz que podría cambiar el rumbo de esta investigación llegó cuando el 24 de mayo, alias ‘Santiago’ uno de los autores intelectuales del secuestro de los asambleístas, afirmó que quien aparecía y hablaba en el video que supuestamente era logística de el ex candidato a la alcaldía de Cali, no era éste sino el abatido guerrillero alias ‘J.J’.

Sin embargo el testimonio no fue suficiente y el Fiscal General de la Nación, Eduardo Montealegre, aceptó la petición de la defensa de Sigifredo para que el FBI hiciera un cotejo de voces para corroborar que quien dio indicaciones para el plagio no era López. El 1 de junio, la Fiscalía negó nuevamente su libertad.

Pese a la negativa, la esperanza de libertad e inocencia reapareció el 20 del mismo mes, cuando el resultado del cotejo de voces realizado por el FBI, salió a favor del ex diputado. Una vez más, esta prueba a favor no fue concluyente para su libertad. Por el contrario, la Fiscalía dictó medida de aseguramiento contra el ex alcalde de pradera. López tendría casa por cárcel.

El proceso entre oscuro y claro tendía a enredarse cuando el 22 de junio aparecieron dos testigos, ex guerrilleros, que afirmaba que la esposa de López lo había visitado en cautiverio.

López permaneció en su casa, detenido, con un brazalete del Inpec durante casi dos meses. En los que la claridad no llegó siempre, los procesos de apelación, revocatoria de la medida de aseguramiento, denuncias por arbitrariedad en la detención por parte de la Fiscalía se hicieron presentes, pero la libertad tardó un poco más.

Pero llegó. El 14 de agosto se anunció la libertad inmediata de Sigifredo López. Las pruebas en su contra nunca fueron determinantes y los testigos que atestiguaron en su contra, fueron al igual que este episodio, un falso positivo judicial.

López afirmó estar felíz con su libertad, pero su honra sigue encarcelada, pues fue sometido al escarnio público de la manera más cruda.

Errores como este le cuestan al Estado $9 billones de pesos, pero la dignidad le cuestan mucho más a quien se vuelve víctima de un proceso investigativo que desde el principio tuvo irregularidades como las que han afirmado expertos, existieron en éste. El caso que llevó a un ex secuestrado, que sufrió en carne propia el rigor de la guerra en Colombia, a ser el más temible monstruo social y asesino de toda la historia.