"No nacimos en el cuerpo equivocado, es la sociedad la que está equivocada"
Cerramos la serie Derechos Humanos de las Mujeres Trans con Valerie Summer Herrera, una mujer de 23 años quien solo hace 2 decidió iniciar su construcción física femenina. Decisión que tomó estando en 3 semestre y que la hizo sufrir hechos de discriminación de parte de compañeros y profesores. Esa experiencia, sin embargo, la ha fortalecido como activista y hoy está más decidida a defender sus Derechos ante una sociedad que aún la estigmatiza y rechaza.
"No nacimos en el cuerpo equivocado, es la sociedad la que está equivocada"
Junio 15-2014
Por Diana Muriel
Así es como lo expresa Valerie Summer Herrera, una mujer trans de 23 años, estudiante de tercer semestre de Licenciatura en Educación Popular de la Universidad del Valle "¿Quién nace en un cuerpo equivocado? Nadie. Es la sociedad que no está preparada para creer que los cuerpos pueden transitar, pueden cambiar". Nunca se sintió identificada con el género masculino, nunca le gustó jugar fútbol, ni a los carritos, ni compartir con otros niños. Su felicidad era jugar a las muñecas con sus hermanas, pero esto era algo preocupante para sus padres. Su madre fue comprendiendo pero se preocupaba que en el algún momento pudiera ser discriminada por esto.
"Desde que estaba en el colegio me decían cosas como ´ahí viene la niña que no es niña, el gay´ pero nunca me he considerado ni gay, soy bisexual". Al ingresar a la Universidad, Valerie aún se vestía como hombre aunque no se sintiera identificada para nada con este género. Fue a sus 21 años cuando decidió transformar su apariencia física, "comencé a transformar mi ropa de hombre y empecé a buscar ropa de mujer y aplicarme hormonas. Para mi este cambio fue mi autodeterminación". Con las hormonas su apariencia masculina que era tan marcada se empezó a desvanecer. Sus caderas se fueron anchando y sus senos fueron creciendo.
Pero con esta autodeterminación como ella la llama, la discriminación y rechazo fueron aumentando. "Siempre me han discriminado. Me dicen cosas como ´maricona´ Imagínate que si por ser afro nos discriminan ahora por ser trans es peor". En la Universidad han sido varias veces en las que ha tenido que afrontar la exclusión, tanto por sus docentes como por sus compañeros de clases. Recuerdo que en una clase estábamos en una mesa redonda, la profesora siempre acostumbraba dar refrigerio, repartieron todos y yo faltaba, un compañero dijo - ah, falta el de él- para mí esto fue tan molesto porque todos conocían mi identidad, él se dio cuenta que me indignó, pero no se disculpó. Finalmente lo terminó haciendo porque la profesora reconoció que había estado mal lo que había hecho".
Así como este caso, Valerie ha tenido que soportar a diario cuando no la llaman ´ella´ sino ´él´ "Hasta cuando he entrado algunos baños públicos también ha sido problema, hay mujeres que les incomoda y han llegado hasta el punto de preguntarme ´¿qué haces aquí?´ ". Cansada y agotada de tanta discriminación por parte de sus compañeros, tuvo que suspender un semestre "Ya no aguantaba más. Yo soy un ser humano como cualquiera y la gente no se da cuenta que sus palabras y actos me afectan y lastiman. Me cansé, me cansé de tanta discriminación, del rechazo, de las malas miradas, de los comentarios, etc., ya me daba pereza venir a la U. En los primeros semestres era una de las mejores académicamente, debido a estas circunstancias mi rendimiento académico comenzó a bajar cada día más, hasta que no tuve más remedio que parar mi carrera".
Así como este caso, otras mujeres trans que tienen la oportunidad y deciden formarse profesionalmente deben luchar contra la discriminación y el rechazo "En Colombia la educación es precaria. Las mujeres trans desde que empiezan su cambio a los 12 años son rechazadas y llegan hasta ser expulsadas de los colegios. Ni los colegios ni las academias están preparadas para recibirlas porque acá toca argumentar tu identidad" cuenta Valerie.
Quizás por este mismo flagelo que tienen que vivir la mayoría de mujeres trans, tanto en lo educativo como en lo laboral son pocas las oportunidades con las que cuentan "por esto es que muchas de ellas o son peluqueras o son prostitutas, porque no nos brindan otras oportunidades" afirma Valerie.
A pesar de que los primeros semestres han sido difíciles para ella, está decidida a seguir estudiando. Ya solicitó reingreso para continuar su carrera "Si me toca seguir enfrentando a más personas por ser una mujer trans lo voy hacer".
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Otras notas de esta serie:
DDHH de las Mujeres Trans 1
Derechos Humanos de las Mujeres Trans 2: En cuerpo ajeno
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